Los octópodos (Octopoda, del griego, octó, ocho y podós, "pies") son un orden de moluscos cefalópodos conocidos comúnmente como pulpos. Carecen de concha y poseen ocho brazos. Son animales marinos y carnívoros.
Anatomía
Los ocho brazos de los pulpos cuentan con ventosas pegajosas y convergen en el cuerpo del animal; en su punto de convergencia presentan la boca provista de un pico córneo. En la cabeza se alojan los ojos, muy desarrollados, el cerebro y tres corazones. Dos de ellos bombean sangre a las dos branquias y el tercero al resto del cuerpo. En el manto se ubican el resto de vísceras, como el depósito de tinta que emplean para escapar de sus depredadores; también cuentan con un sifón, el cual a diferencia de los calamares, puede cambiar de dirección, con el que expulsa una gran cantidad de agua, impulsándose así a gran velocidad.
Cada uno de sus brazos se conecta con un cerebro pequeño que depende del principal, los cuales usa para controlar sus brazos.
Los pulpos más pequeños, como el pulpo de anillos azules que vive en Australia, alcanzan tallas de unos 15 cm. El pulpo común Octopus vulgaris puede alcanzar los 3 m de largo y 12 kg de peso. Las especies más grandes llegan a los 6 metros y los 70 kg, como Haliphron atlanticus y Enteroctopus dofleini.
Los pulpos tienen tres corazones: dos de los corazones llevan sangre sin oxígeno a las branquias (que son los órganos respiratorios mediante los que se realiza el intercambio de gases) y el tercero transporta la sangre oxigenada al resto del cuerpo. El color azul de la sangre se debe a que los pulpos, sepias y calamares utilizan hemocianina en lugar de hemoglobina como molécula transportadora de oxígeno; la hemocianina contiene cobre en lugar de hierro, por lo cual tiene color azul.
Inteligencia
a diferencia de los calamares no pueden escapar rápidamente en situaciones de peligro.1 Sin embargo, los pulpos que habitan en arrecifes rocosos pueden ocultarse más fácilmente que los pulpos que viven en hábitats de bajo relieve, quienes se convierten en animales bastante vulnerables cuando se encuentran fuera de su guarida.
A pesar de que todas las especies de pulpos tienen la capacidad para cambiar el color y textura de su piel (muchas especies se pueden mezclar con el suelo marino y parecer como rocas),4 el pulpo imitador fue la primera especie de pulpo reportada capaz de imitar otras especies marinas.1 Hoy en día se conoce que existen más pulpos que pueden asemejarse a otros animales, pero no a una gran variedad como sí lo hace Thaumoctopus mimicus.2 La conspicuidad y el mimetismo son la primera estrategia de defensa de los pulpos, mas no la cripsis.2
Una característica a resaltar sobre Thaumoctopus mimicus es que puede realizar el cambio de apariencia sin necesidad de que esté presente en el entorno el animal al que quiso asemejarse; contrario al calamar S. sepioidea quien hace la imitación del pez loro mientras se encuentra cercano a un banco de estos peces.1
Debido a que esta especie regularmente emplea camuflaje y estrategias para evitar a sus predadores, se cree que el pulpo no es tóxico para varios de éstos, lo cual ha llevado a preguntarse si se trata de un mimetismo Mülleriano o mimetismo Batesiano. Sin embargo, se conoce que T.mimicusemplea su mimetismo también para poder cazar presas que regularmente le huirían a un pulpo.
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